SUEÑO TÁCTIL – 2009

Sueño Táctil es mi tercer disco, compuesto por 14 canciones, y en el que suenan tanto melodías y armonías con aires de raíz folklórico, como sonidos e instrumentos de otras tierras.

FICHA TÉCNICA:

Agustin Cristiani: Bajo, guitarra, mandolina, percusión, armonica, voz y efectos.
Hernán Míguez: Piano, acordeón y melódica.
Augusto Blanca: Voz en «dos estrofas para recordarte».
Nicolás Porley: Saxo soprano y tenor.
Marcos Meroni: Gaita.

Grabado entre los meses de junio y diciembre de 2009 en el Estudio de los Vientos de Agustin Cristiani, excepto los arreglos de Hernán Míguez grabados en Veta Estudio y la voz de Augusto Blanca, grabada en los Estudios Isabela de La Habana, Cuba.

Sueño Táctil es el resultado de un lento y sentido trabajo que llevó poco más de dos años de gestación, y el que guarda 14 canciones, compuestas entre los años 2007 y 2009. Muchas de ellas esbozadas en otras tierras del Continente americano, como Chiapas (México), La Habana (Cuba) y Santa Clara (Guatemala).

El tiempo que ha corrido me ha mostrado desconocidas sensaciones relacionadas a un nuevo amor: el cariño por las músicas de nuestro suelo argentino, el descubrimiento de sonidos con ganas de florecer en mi alma, y armonías con aires de zambas, milongas y valses criollos que pretenden entrar en mi música de aquí y para siempre.

Así es, me animé a dejar pasar la luz que entra desde esta ventana apenas entreabierta y osé en acercarles mediante este disco, mis primeros pasos por el folklore, aunque en estas palabras, quisiera mencionar que dichos aires folklóricos vienen cargados de algunos experimentos sonoros personales y de ciertos pasos contemporáneos en relación al folklore tradicional, y con esto me refiero a la instrumentación utilizada, por ejemplo el uso de un Udu: (instrumento de percusión de origen africano) en una canción con aire de zamba.

Pero no todas las canciones guardan aires meramente folklóricos, también se escuchan las músicas que siempre me han acompañado y enseñado, canciones de arpegios continuos y melodías dulces que fui aprendiendo con el tiempo…

En este Sueño táctil tuve la fortuna de contar con la ayuda impagable de músicos amigos que le dieron otro color al asunto. Hernán Míguez puso sus manos en muchas de las ideas que se guardaban en mi cabeza, y desde su piano, su acordeón y su melódica las pudimos plasmar. Los vientos agitados por los geniales saxofones tenor y soprano los sumo Nicolás Porley. La fascinante e inesperada gaita afinada en Sol me la regalo Marcos Meroni. Y la voz inconfundible de acento cubano me la envió Augusto Blanca desde La Habana. Lo demás, corre por cuenta de quien escribe.

Dedico este trabajo a la Patagonia, a los arenales, a los montes, a los álamos que detienen los vientos, a los ríos y sus barrancos, a los lejanos horizontes y a la soledad de su tierra, la que me vio nacer…